Con triplete de su goleador Meximilano Silvera, Peñarol aplastó este miércoles 5-0 en Montevideo (4-0) al venezolano Caracas, trepando al segundo lugar en el Grupo G de la Copa Libertadores.
Solo un cuarto de hora duró realmente el partido en el Campeón del Siglo: hasta que apareció por primera vez el centrodelantero y goleador Maximiliano Silvera y puso, a los 16, su sello de eficacia y calidad.
De ahí en más todo fue amarillo y negro, y Peñarol pudo alcanzar este miércoles el segundo lugar de la llave, con tres puntos, igualado con Rosario Central pero con mejor diferencia de goles.
Los brasileños de Atlético Mineiro, que más temprano habían derrotado en casa al equipo argentino 2-1, tienen puntaje ideal (seis puntos) y Caracas cierra sin unidades.
– A matar –
Para Peñarol era matar o comenzar a irse despidiendo temprano, otra vez, de su ilusión de poder pelear su sexta Libertadores.
Tras su derrota de la semana pasada por 1-0 en su visita a Rosario debía cambiar la pisada ante su público. Lo logró con creces.
El «manya» había comenzado con dinámica pero también con nerviosismo y desprolijidad y Caracas había mostrado cierto criterio para manejar el balón y lanzar algunos ataques.
Pero la primera llegada a fondo del aurinegro liquidó el encuentro: Eduardo Darias cabeceó la pelota hacia Silvera, y el delantero picó y anticipó de zurda al arquero venezolano Wuilker Fariñez.
Nueve minutos más tarde, Silvera conectó en el área un centro desde la izquierda de su tocayo Olivera y 2-0.
Una falta sobre el polifuncional Eduardo Darias le permitió a Leonardo Fernández ejecutar uno de sus habituales tiros libres precisos que Javier Méndez tomó de cabeza para anotar el tercero.
Iban 31. Dos minutos después a punto estuvo Silvera de conseguir su triplete tras soberbia jugada de todo el ataque. Faríñez lo impidió.
No pudo sin embargo el arquero evitar su cuarta caída a los 44, cuando Darias culminó una jugada iniciada por Fernández y prolongada con un centro al área por Javier Méndez.
– Solo uno más –
Para el segundo tiempo solo podían esperarse más goles del local. El desenlace ya no tenía incertidumbre.
Cuando Peñarol aceleró llegó el hat-trick de Silvera, que a los 62 aprovechó un rebote dado por el arquero al despejar un disparo desde fuera del área de un exuberante Leonardo Fernández.
Un minuto después pudo ser el cuarto de Silvera. Se lo perdió por poco.
Cuando a los 70 el goleador dejó su lugar a Ignacio Sosa lo despidió una ovación.
Peñarol siguió atacando por las bandas, la clave de su éxito de este miércoles, y jugando bien, destacando Fernández con sus pases sutiles y el juvenil Franco González, campeón mundial sub 20 con la selección uruguaya en 2023, con su vértigo.
Dos combinaciones entre ambos casi derivan en el sexto, a los 87 y a los 90+3. Faríñez le ganó el duelo a González en ambas ocasiones.
Para Diego Aguirre, el entrenador y exgoleador de Peñarol, todo fueron alegrías. Para los dirigidos por Henry Méléndez la preocupación es mayúscula: en dos partidos recibieron nueve goles y marcaron apenas uno.
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