La vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, nombró el martes al gobernador del estado de Minnesota, Tim Walz, como su compañero de fórmula del Partido Demócrata para enfrentar al republicano Donald Trump en las elecciones de noviembre.
Estamos «listos para ganar», dijo la campaña de Harris en su página web. «Como gobernador, entrenador, maestro y veterano, defendió los intereses de familias trabajadoras como la de él», agregó en la red social X la vicepresidenta y candidata demócrata, que dijo estar «orgullosa» de su elección.
Poco conocido fuera de las fronteras del estado de Minnesota, este hombre de 60 años es dueño de un historial atípico, ya que tiene décadas de experiencia militar, fue profesor de geografía y entrenador de football americano.
«Es el honor de mi vida unirme a Kamala Harris en la campaña», dijo Walz en X tras su nombramiento. «Voy a darlo todo. Me recuerda un poco al primer día de clases», agregó.
Walz aporta una perspectiva rural, de la región Medio Oeste de Estados Unidos, a la campaña de Harris, al tiempo que ha marcado objetivos de política liberal como la legalización del cannabis para uso recreativo y el aumento de protecciones federales para los trabajadores.
– Gira por EEUU –
Walz, quien se convertiría en vicepresidente si Harris es elegida el 5 de noviembre en su duelo frente a Trump, tiene previsto asistir a una primera reunión en tándem el martes por la noche en la ciudad de Filadelfia (Pensilvania).
A continuación, se desplazarán a otros estados clave de aquí al sábado en una gira fundamental que debería marcar el tono de su acuerdo y la complementariedad de propuestas.
Pensilvania es uno de los estados clave que llevaron a Joe Biden a la Casa Blanca en 2020 y que los demócratas tendrán que volver a ganar en noviembre si quieren mantener el poder.
La incorporación de Walz a la fórmula debería permitirle a Harris atraer a un electorado más amplio que el que la apoya directamente y ayudarle a compensar sus puntos débiles.
Harris tuvo apenas dos semanas para efectuar su elección, un proceso de selección que usualmente suele durar meses. Ello, después de que Biden se retirara de la carrera el 21 de julio ante reiterados pedidos dentro del partido por dudas sobre su salud y tras un pobre primer debate televisivo contra Trump.
«La primera decisión importante que hace un nominado del partido es su vicepresidente. Y Kamala Harris tomó una gran decisión al escoger al gobernador Tim Walz como su compañero de fórmula», escribió Biden en la red social X.
La dupla Harris-Walz deberá ser oficialmente nominada durante la convención demócrata en Chicago, que arranca el 19 de agosto.
La lista de posibles candidatos a vicepresidente incluía a Josh Shapiro, gobernador de Pensilvania, y a Mark Kellt, un exastronauta que actualmente es gobernador por Arizona.
– Ataques a Walz –
El equipo de campaña de Trump reaccionó de inmediato con dureza a la designación.
«Si Walz no le dice la verdad a los votantes, nosotros lo haremos: al igual que Kamala Harris, Tim Walz es un peligroso liberal extremista», escribió en un comunicado la portavoz de la campaña de Trump, Karoline Leavitt.
Anticipándose a los ataques, la influyente congresista demócrata Nancy Pelosi había dicho más temprano que caraturizar a Walz «como de izquierda» es «surrealista». «El está justo en el centro», dijo en entrevista con MSNBC.
Después de dos semanas, Harris ha acortado la ventaja en la intención de voto que ostentaba Trump sobre Biden y recibió importantes donaciones a su campaña, marcando un comienzo prometedor, pero que tendrá que sostener los próximos tres meses.
Poco después de sufrir un intento de asesinato en Pensilvania, Trump eligió como compañero de fórmula a J.D. Vance, de 40 años y senador por Ohio, otro estado industrial del Medio Oeste.
Pero en los últimos días Vance ha protagonizado varias polémicas, que hacen pensar en que, por ahora, es más un obstáculo que un aporte a la campaña de Trump.
En los próximos días, Vance visitará algunos de los mismos estados que la dupla demócrata para difundir el mensaje de Trump, que acusa a Harris de ser responsable de la crisis migratoria.
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