Tooele, Utah.- Segun autoridades judiciales, Héctor Ramón Martínez-Ayala, un hombre hispano de 54 años, ha sido acusado del trágico asesinato de su hija adulta, Marbella Martínez, de 25 años.
Según la fiscalía, Martínez-Ayala confesó su crimen a través de un inquietante mensaje de texto enviado a su hermano, en el que admitió haber cometido “un gran error” y expresó su miedo por las consecuencias de sus acciones. Tras el envío del mensaje, el acusado huyó del país utilizando la tarjeta bancaria de su hija para retirar dinero, lo que complicó aún más el caso.
Marbella Martínez había residido con su padre en Tooele, una ciudad ubicada al oeste de Salt Lake City, hasta que la situación se volvió insostenible. Documentos judiciales indican que la víctima se mudó a un hotel debido a una serie de mensajes de texto obsesivos, vigilancia y acoso por parte de su padre, cuyo comportamiento se describía como el de un “amante celoso” en lugar de un padre protector. Fue incluso encontrado un artículo de su ropa interior en la habitación de Martínez-Ayala, lo que refleja la naturaleza perturbadora del acoso.
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Los fiscales informaron que en julio, el padre colocó un dispositivo de seguimiento en el vehículo de Marbella mientras ella estaba fuera del país, utilizándolo posteriormente para localizarla mientras ella estaba en una excursión con su pareja. La situación culminó en un trágico desenlace cuando, el 31 de julio, el padre estranguló a su hija al regresar a casa.
Las pruebas contra Martínez-Ayala son contundentes. Las cámaras de seguridad de la propiedad se desactivaron de manera sospechosa justo antes del crimen, pero se encontraron evidencias como huellas digitales y datos de ubicación en los teléfonos de ambos. Ese mismo día, el mensaje de texto enviado a su hermano reveló la angustia y desesperación del acusado: «Cometí un gran error, un pecado imperdonable, ahora tengo demasiado miedo y no sé qué hacer. Creo que nunca volveré.»
Después de escapar, el hombre fue visto pasando por la aduana hacia un país que aún no ha sido revelado, utilizando la identificación de su hermano. El cuerpo de Marbella fue encontrado el 1 de agosto en su dormitorio tras una llamada de verificación de bienestar a la policía.
Héctor Ramón Martínez-Ayala enfrenta graves cargos, incluidos asesinato, obstrucción a la justicia, robo de una tarjeta bancaria y acoso, además de un delito menor de robo de identidad. Este caso subraya la importancia de abordar y prevenir la violencia doméstica, ningún hogar debería ser un lugar de terror.
