Tras unas últimas victorias sin brillo, el mexicano Saúl ‘Canelo’ Álvarez quiere ratificar su condición de emblema del boxeo mundial el sábado en Las Vegas (Estados Unidos) frente al invicto Jaime Munguía, primer compatriota al que enfrenta desde 2017.
Durante años, Álvarez se negó a medirse con rivales mexicanos, alegando que él peleaba para representar a su país. A sus 33 años, ‘Canelo’ rompe ahora su norma asegurando que Munguía se ganó la oportunidad de disputarle sus cuatro cinturones del peso supermediano (168 libras – 76,2 kg) en esta cita enmarcada en las festividades mexicanas del 5 de Mayo.
Munguía, de 27 años, es un púgil discreto fuera del ring, alejado de los excesos de otros boxeadores, pero con un tamaño (diez centímetros más alto que ‘Canelo’) y potencia de fuego que pueden poner en problemas al experimentado campeón.
«Por supuesto él tiene poder. Es un buen boxeador, me gusta su estilo», reconoció Álvarez en la rueda de prensa previa.
Aún así, el púgil de Guadalajara (oeste) se mostró seguro de que su talento y experiencia le permitirán salir airoso de un duelo destinado a entrar en la memoria del boxeo mexicano, donde se recuerdan batallas como las que protagonizaron Erik Morales y Marco Antonio Barrera a principios de siglo.
«No sé si (Munguía) es más joven o más viejo que yo. Pero yo soy Canelo y no me importa», recalcó. «Vamos a ganar contundentemente, a eso venimos. Que todo el mundo disfrute y que sea una fiesta mexicana».
– Un nocaut necesario –
Para ‘Canelo’, la cita en el T-Mobile Arena (20.000 asientos) será la cuarta defensa de sus cinturones del peso supermediano de la OMB (Organización Mundial de Boxeo), AMB (Asociación Mundial), CMB (Consejo Mundial) y FIB (Federación Internacional).
Álvarez se convirtió en el primer campeón indiscutible de esa división noqueando al estadounidense Caleb Plant en 2021.
Un año después buscó nuevas gestas retando al ruso Dmitry Bivol, campeón del peso mediopesado (175 libras – 79,4kg), un desafío que acabó en fiasco y le costó la segunda derrota de su carrera.
Desde entonces, ‘Canelo’ encadena tres victorias por decisión unánime frente a su archirrival Gennady Golovkin, que peleó con 40 años, John Ryder y Jermell Charlo.
Al mexicano, que ha liquidado por nocaut 39 de sus 60 victorias, le urge acabar por la vía rápida con los sueños de Munguía, que puede llenarse de cinturones si es capaz de batir a su ídolo.
El peleador de Tijuana (noroeste), que cuenta por victorias sus 43 combates (34 de ellos por nocaut), resta importancia a su menor presencia en los grandes escenarios y asegura que su respeto por Álvarez «se termina arriba del ring».
«Yo no he tenido experiencia con grandes nombres, pero lo que tengo y dónde he llegado me lo he ganado a pulso», subrayó. «Me gusta que venga con la mentalidad de ganarme y de noquearme, pero yo voy con la misma mentalidad».
– Choque con De la Hoya –
Explotando su demoledora pegada, Munguía se ha labrado un nombre en el competitivo boxeo mexicano y sabe lo que es ganar un título mundial, el de superwelter de la OMB, que renunció a defender para subir de categoría.
El mexicano entrena desde el año pasado a las órdenes del reputado Freddie Roach, preparador de decenas de campeones mundiales, y su carrera avanza bajo el paraguas de Golden Boy, la promotora de Oscar de la Hoya.
Es precisamente el pleito entre De La Hoya y su exprotegido ‘Canelo’ el que hizo estallar por los aires el clima de respeto que rodeaba al combate.
De la Hoya, una exfigura del boxeo estadounidense de raíces mexicanas, abrió fuego el miércoles ante la prensa asegurando que «Golden Boy construyó a Canelo Álvarez, punto».
Álvarez lo interrumpió con graves insultos y se levantó para encararlo, mientras varias personas se interponían entre ambos.
«Yo ya vine a Estados Unidos siendo el Canelo y él sólo lucró con mi nombre», clamó el mexicano, que colaboró durante más de una década con Golden Boy hasta su sonada ruptura en 2020. «Lo único que hace es ser una lacra en el boxeo, robarle a los boxeadores. Si yo no hubiera metido a mis abogados, me robas».
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