Kristina Olson, una joven de Michigan, y Ned Felder, capitán del Ejército durante la Guerra de Vietnam, entablaron una amistad desde hace 56 años cuando ambos comenzaron a intercambiar cartas como amigos por correspondencia. Cuando Olson tenía 13 años participó en un proyecto de las Camp Fire Girls, que consistía en contactar a “cualquier soldado” luchando en la guerra.
Según un comunicado de prensa de la Universidad Estatal de Carolina del Sur, la carta llegó casi por accidente a Felder, graduado de la Universidad Estatal de Carolina del Sur en 1959.
“Fue rico, emocional; alguien, una niña de séptimo grado, siendo capaz de corresponder con ella”, expresó Felder según el comunicado.
Luego, agregó: “Creo que ese tipo de interacción entre soldados y civiles ocurrió en otras guerras. Me hizo sentir bien poder estar en contacto con alguien de vuelta a casa, además de mi familia”.
Con los años, Olson y Felder continuaron su correspondencia. “Solo ver algo que venía de Vietnam en ese momento, mi vida solía ser muy protegida, y mi escuela secundaria estaba en un huerto de manzanas, así que cualquier cosa del mundo era increíble”, recordó Olson.
Tras ello dijo que “él me hizo querer ser una mejor persona, que es lo mejor que puedo decir de alguien. Me gusta estar cerca de personas que me hagan querer ser la mejor persona que pueda ser”.
Tras perder el contacto en la década de 1970, los dos se volvieron a conectar después de que Feeney, nombre de casada de Olson, contactara a la universidad para encontrar a Felder, según consigna The Washington Post.
Seguidamente, Feeney mencionó que las recientes muertes de su esposo e hijo la motivaron a ponerse en contacto con Felder, quien ya cumplió los 80 años.
La historia se hizo conocida ante los medios de comunicación cuando los antiguos amigos por correspondencia se reunieron por primera vez en la universidad en el marco del pasado Día de los Veteranos.
