Los Ángeles, California.- Un agente de la Oficina del Alguacil del condado de Los Ángeles que estaba fuera de servicio frustró un robo que se llevaba a cabo en un 7-Eleven.
El suceso ocurrió el sábado por la tarde cuando el agente estaba en la tienda haciendo unas compras, cuando de pronto, cuatro hombres ingresaron para perpetrar un robo.
El agente observó a los maleantes mientras intentaban acceder a la caja registradora para tomar el efectivo por lo que se tomó unos minutos para solicitar refuerzos.
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Cuando las unidades respondieron al llamado del oficial, el hombre encaró a uno de los maleantes y logró que los demás se rindieran. Los refuerzos llegaron al poco tiempo y el robo pudo ser frustrado.
No se reportaron heridos durante la acción.
