Las devastadoras inundaciones provocadas por las intensas lluvias en el sur de Brasil han cobrado la vida de al menos 90 personas y dejado a 132 desaparecidos, según el último informe dado a conocer este lunes por las autoridades locales.
El estado de Rio Grande do Sul, limítrofe con Argentina y Uruguay, ha sido gravemente afectado por esta catástrofe climática. Las autoridades están investigando la posible relación de otros cuatro fallecimientos con las precipitaciones que han azotado la región durante la última semana.
La mayoría de las víctimas, 85 de las 86 registradas hasta el momento, se concentran en Rio Grande do Sul, mientras que el restante fallecimiento ocurrió en el estado vecino de Santa Catarina.
Más de 1.1 millones de habitantes de 385 municipios se han visto afectados por las lluvias, sufriendo escasez de alimentos, medicamentos y servicios básicos como electricidad y agua.
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Según datos de la Defensa Civil local, más de 153,000 personas han debido abandonar sus hogares, buscando refugio con familiares o en albergues improvisados.
El río Guaíba ha inundado el centro histórico de Porto Alegre, la capital regional, así como varias ciudades de la zona metropolitana. Además, las inundaciones y deslizamientos de tierra han causado graves daños en numerosas localidades del interior de Rio Grande do Sul.
Con una población de 11 millones de habitantes, Rio Grande do Sul cuenta con 496 municipios, de los cuales 385 han sido impactados por esta tragedia. Cerca de 1.2 millones de hogares y negocios permanecen sin suministro eléctrico, mientras que 98 municipios carecen de servicios de telecomunicaciones.
Además, se reportan bloqueos en 47 carreteras debido a la crecida de los ríos y deslizamientos de tierra.
Actualmente, más de 14,500 miembros de equipos de rescate de varios estados y militares están trabajando arduamente en las labores de asistencia a las víctimas.
Los pronósticos meteorológicos indican la posibilidad de nuevas lluvias en las zonas ya afectadas por los temporales, debido a un nuevo frente frío que traerá fuertes precipitaciones en los próximos días al extremo sur del país.