Washington, D.C.- El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) confirmó la realización del primer vuelo militar destinado a trasladar “delincuentes extranjeros” a la Bahía de Guantánamo, Cuba, un paso importante en la política de deportación hacia individuos asociados con la criminalidad organizada. Entre los deportados se encuentran miembros de la peligrosamente activa banda criminal venezolana, Tren de Aragua.
La secretaria de Seguridad Nacional subrayó: “Los peores de los peores delincuentes serán retenidos en las instalaciones militares”. Esto establece un claro enfoque del gobierno hacia la utilización de Guantánamo como un centro de detención para personas cuya peligrosidad representa una amenaza para la seguridad nacional.
El vuelo aterrizó el martes por la noche, marcando el inicio de un aumento esperado en el número de migrantes enviados desde Estados Unidos a esta histórica base naval, que en el pasado albergó a detenidos relacionados con los ataques del 11 de septiembre de 2001. Según el presidente Donald Trump, Guantánamo tiene la capacidad de albergar hasta 30,000 personas, y ha sido descrito como un “lugar perfecto” por el secretario de Defensa, Pete Hegseth, quien sirvió en la instalación durante su tiempo en las fuerzas armadas.
En días recientes, se han enviado más tropas estadounidenses a la base para asistir en la preparación de este proceso. Se estima que aproximadamente 300 miembros del ejército están apoyando las operaciones de detención, con un contingente de al menos 230 infantes de Marina del 6to Regimiento de Marines, cuyo despliegue comenzó el viernes pasado.
Este vuelo marca una nueva fase en la política de deportación, que incluye también el regreso de migrantes indios a su país natal y anteriormente realizó vuelos de deportación a países como Ecuador, Guam, Honduras y Perú. Aun así, el DHS no ha proporcionado detalles específicos de la operación actual, debido a su naturaleza sensible.
