Los miembros de una familia en Stellenbosch, Sudáfrica, fue testigo de una pesadilla cuando hallaron debajo de una almohada de la cama una cobra del Cabo, una de las serpientes más venenosas de esa región y que representa un riesgo significativo para las personas y animales que se crucen en su camino.
El incidente quedó registrado en video por Stellenbosch Snake Removals, un servicio especializado en la captura y remoción de serpientes peligrosas, que mostró al experto en reptiles, Emile Rossouw, capturando al peligroso animal. “No es algo que quieras en tu cama”, decía a modo de broma.
Junto con la mamba negra, la cobra del Cabo es considerada la responsable de la mayoría de las mordeduras mortales en Sudáfrica. Desde el African Snakebite Institute afirman que puede alcanzar una longitud de hasta 2 metros, y que se caracteriza por su rapidez y su capacidad para levantarse y mostrar su capuchón cuando se siente amenazada.
Esta serpiente varía en color desde casi negro a oscuro o marrón claro, beige, amarillo o moteado, mientras que los ejemplares jóvenes tienen una banda oscura en la garganta. El cobra del Cabo se confunde fácilmente con la Serpiente Topo y la Cobra Escupiente Negra, agrega la organización.
Sobre la peligrosidad señalan que el veneno es potentemente neurotóxico causando debilidad progresiva y pudiendo afectar la respiración rápidamente. «Las víctimas necesitan hospitalización urgente y el antiveneno es esencial», finalizan.