NN Deportes, Análisis.- La selección que inició el año resonando en todo el mundo, cierra esta zafra mundialista con resultado desesperanzador, que hace que Venezuela vuelva con “las tablas en la cabeza” a su posición natural en las eliminatorias de la Conmebol, con un resultado desalentador de 4-2 ante Chile, la Vinotinto quedó nuevamente fuera de la clasificación al próximo mundial.
Pese a que Venezuela logró adelantarse en el marcador en dos ocasiones, con goles de Jefferson Savarino y Rubén Ramírez, no pudo siquiera hacer verdadero daño en el Estadio Nacional de Santiago de Chile, donde prácticamente compartían la localía en las gradas con los chilenos. Con el resultado final, la Vinotinto queda en la octava casilla del puesto de las eliminatorias, fuera incluso del repechaje.
Entre los destacado pero por su mala actuación en el partido, la Vinotinto cuenta con su propio capitán Tomás Rincón, quien pese a su jerarquía debe dar un paso al costado para darle espacio a las otras generaciones; aunque lo seguidores del mediocampista venezolano aún le den aliento, es preciso recordar que como capitán no le ha brindado ninguna alegría a Venezuela, equipo que carece de ídolos verdaderos ya que en su historia este combinado no ha logrado absolutamente nada.
Cortesía de Rincón, Chile colocó la paridad en el marcador ya que el capitán del equipo venezolano regaló el tanto en propia puerta que sumaba ya al golazo marcado por Eduardo Vargas quien se paseó en la defensa vinotinto sin que tuviese oposición. Posteriormente Lucas Cepeda con su doblete y Eduardo Vargas sellaron la victoria para Chile.
En materia defensiva, Venezuela debe tomar medidas en planteamiento y recambio de jugadores, si bien Rubén Ramírez logró marcar un gol por error de la defensa chilena, a la hora de hacer su verdadera labor dio mucho de qué hablar, su compañero de zaga Wuilker Ángel es otro de los jugadores venezolanos que no rinde profesionalmente en la defensa, muy poca inteligencia para evitar que los atacantes se muevan en su campo, mal posicionamiento y malas salidas.
En los laterales solo existe Jon Aramburu, su compañero del otro extremo Miguel Navarro simplemente fue un pasillo.
En ataque, es hora de cambiar radicalmente la forma en que se proyecta la ofensiva, el cuadro venezolano no puede seguir jugando para Salomón Rondón, si bien es el goleador histórico de Venezuela, es momento de tocar tierra y darse cuenta que Venezuela no ha logrado nada en su historia y es momento de dejar de idolatrar a jugadores que en su carrera son regulares.
Hay jugadores en el banquillo venezolano que en pocos minutos en campo demostraron o crearon más jugadas peligrosas que los titulares consolidados que llevaban más de una hora en campo.
“No considero que hayamos sido ampliamente superados”
“No considero que hayamos sido ampliamente superados por Chile. Los goles fueron producto de errores propios. Chile no tenía como entrar, pero el fútbol tiene esas cosas”, aseguró en rueda de prensa el director técnico del cuadro venezolano, Fernando “Bocha” Batista, tras el mazazo que se llevó en Santiago.
De hecho, fue con Chile que el “Bocha” abrió su corta racha ganadora, hace 13 meses, racha que apenas le perduró hasta la Copa América, donde derrotó a un México claramente inferior pero cayó ante uno de los equipos menos vistosos de la Concacaf, Canadá.
Oportunamente, el DT de la vinotinto logró sacar algunos resultados adelante como cuatro empates en casa contra Ecuador, Uruguay, Argentina y Brasil; estos dos últimos encuentros con factores que van más allá de lo futbolístico.
Por ahora, la montaña de fe que acompañaba al “Bocha” y su combinado se ve derrumbada, con posibilidades de lograr la clasificación dependiendo de su propio esfuerzo y de que se den varios “milagros” en las próximas jornadas el año entrante.
Venezuela reanudará las eliminatorias en marzo de 2025 con una visita a Ecuador, donde darán su último esfuerzo “por el honor” para lograr encaminarse nuevamente en la ruta mundialista.
Si los venezolanos de verdad quieren ir al próximo mundial es momento de hacer desde ya ese cambio generacional y darle de baja a esos “jugadores históricos” que aún no le cambian la historia a la Vinotinto.