The Offline Club, un café en Ámsterdam, está ganando popularidad a nivel mundial por una inusual prohibición a sus clientes: el uso de celulares y computadoras en sus instalaciones.
Al entrar, las personas dejan sus dispositivos en una caja de seguridad con el objetivo de disfrutar de horas sin la constante distracción digital. Aunque parezca difícil de imaginar en una sociedad que depende tanto de la tecnología, la aceptación de la premisa de la cafetería la ha convertido en un rotundo éxito.
En entrevista para BBC, Ilya Kneppelhout, uno de sus fundadores del club, afirmó que el negocio empezó como una pequeña iniciativa de tres amigos veinteañeros. “Nuestro celular nos estaba sacando tiempo valioso y ya no conectábamos con la gente”, afirmó.
La cafetería cuenta con más de 389 mil seguidores en Instagram y miles de comentarios positivos. «Increíble cuánto tiempo no nos quedamos sentados todavía en consciencia sin pantalla», «¡Es genial para aumentar la atención y la conciencia y es una lección tanto para niños como para padres!», «¡Estoy tan enamorado de este concepto! Puedo involucrarme algún día en 2025 😍», «Impresionante 🤩», «Ohhh así es como fue mi infancia. Los teléfonos móviles no fueron inventados todavía. Y una vez que fueron inventados el mundo se fue al infierno. Y también lo hizo la humanidad», «Estoy de acuerdo que la sociedad está obsesionada con la tecnología», son algunos de los mensajes que se leen en sus publicaciones.