Washington, DC.- El presidente de los Estados Unidos Donald Trump anunció su intención de aplicar un arancel adicional del 10% a aquellas naciones que se alineen con las políticas promovidas por los países del bloque BRICS, actualmente reunidos en una cumbre de alto nivel en Río de Janeiro, Brasil.
“Cualquier nación que respalde las medidas antiestadounidenses de los BRICS deberá afrontar un arancel extra del 10%, sin excepciones”, escribió Trump en su red Truth Social.
Mientras tanto, los BRICS, integrado por once países del llamado Sur Global y liderado por China y Rusia, desarrollan su XVII cumbre de jefes de Estado y de Gobierno en el Museo de Arte Moderno de Río, bajo estrictas medidas de seguridad. La reunión estuvo marcada por las ausencias físicas del presidente chino Xi Jinping y de su homólogo ruso Vladímir Putin, quien intervino de forma remota.
Durante la primera jornada, los mandatarios emitieron una declaración conjunta de 126 puntos que abarca temas como las disputas comerciales con Estados Unidos, la situación en Oriente Medio y la necesidad de reformas estructurales en organismos internacionales como la ONU, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Si bien el texto expresa inquietudes por el uso de barreras comerciales unilaterales, evita mencionar directamente a Estados Unidos o a Trump.
Por otra parte, el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, confirmó que los aranceles llamados “recíprocos”, cuya aplicación quedó en pausa, entrarían en vigor el 1° de agosto, justo después del vencimiento del plazo previsto para el 9 de julio. Esta fecha límite coincide con el momento en que Washington tiene previsto enviar comunicaciones formales a sus aliados comerciales.
“Creemos que para el 9 de julio, la mayoría de los países habrá recibido una carta o alcanzado algún acuerdo”, señaló Trump ante periodistas en Nueva Jersey, con Lutnick a su lado.
“Pero los aranceles se aplicarán desde el 1 de agosto. El presidente ya está fijando las tasas y términos”, complementó el secretario.
Estas declaraciones reafirman la postura firme de Trump en materia comercial, recordando que la política arancelaria más agresiva fue presentada por él en abril pasado, durante lo que calificó como el «Día de la Liberación», una fecha que marcó el inicio de una nueva fase en su confrontación económica con varios países.