Washington, D.C.- Los inmigrantes originarios de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela acogidos al programa de visas humanitarias CHNV no podrán ser deportados de forma expedita, según lo determinó la jueza Jia M. Cobb del Tribunal de Distrito de la capital estadounidense.
En su fallo, la magistrada ordenó “mantener los derechos” de los solicitantes mientras se revisan los procesos judiciales pendientes relacionados con la legalidad del programa.
El caso se encuentra bajo revisión de la Corte de Apelaciones para el Primer Circuito, con sede en Boston, Massachusetts, en respuesta a una demanda presentada el 24 de marzo de 2025 por organizaciones civiles como CHIRLA, UndocuBlack Network (UBN) y CASA, con representación legal del Justice Action Center. Las entidades buscan impedir la cancelación del programa CHNV, que actualmente protege a unas 500,000 personas.
Aunque la decisión de la jueza Cobb ofrece un alivio temporal, aún podría ser apelada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), que en febrero había emitido una orden para incluir a estos inmigrantes en procedimientos de deportación acelerada.
En paralelo, se escucharon los argumentos del caso Svitlana Doe, et al. v. Kristi Noem, et al. en el Primer Circuito, y se estima que el fallo definitivo podría tardar varias semanas, con la posibilidad de que el proceso escale hasta la Corte Suprema.
El parole humanitario CHNV, implementado por la administración del expresidente Joe Biden, fue creado como una vía legal de ingreso para personas en situación vulnerable. Para ser beneficiarios, los solicitantes deben contar con un patrocinador en EE. UU. y superar revisiones de seguridad migratoria.