Salt Lake City, Utah.- El gobernador Spencer Cox confirmó este fin de semana que Tyler Robinson, principal sospechoso del asesinato del activista republicano Charlie Kirk, se encuentra bajo custodia pero no ha colaborado con las autoridades en el curso de la investigación. La información fue revelada durante su participación en el programa “This Week” de ABC News.
Robinson, de 22 años, no ha confesado el crimen ni ha ofrecido declaraciones a los investigadores, según indicó Cox. “No está cooperando, pero todos los que lo rodean sí lo están. Y creo que eso es muy importante”, señaló el mandatario estatal. Se espera que los cargos formales contra el sospechoso sean presentados el próximo martes.
El gobernador también confirmó que Robinson mantuvo conversaciones en la plataforma Discord después del tiroteo, información inicialmente publicada por The New York Times. “Podemos confirmar que esas conversaciones sí ocurrieron. Al principio, quienes hablaban con él pensaban que se trataba de una broma, hasta que él mismo admitió que era el autor”, explicó Cox.
Durante la entrevista, Cox reveló que el compañero de habitación de Robinson —quien también era su pareja— se encuentra en proceso de transición de género. “Podemos confirmar que su compañero de piso era un novio que estaba en transición de hombre a mujer. Esa es información que el FBI mencionó ayer. También podemos confirmarla. Y que él también está cooperando con las autoridades”, añadió.
El gobernador también se refirió a un informe del Wall Street Journal que señalaba que Robinson estaba “profundamente adoctrinado con la ideología izquierdista”. Cox aclaró que esta caracterización proviene de testimonios de personas cercanas al sospechoso, incluidos familiares, aunque evitó profundizar en los detalles.
“Son circunstancias muy trágicas que nos afectan a todos”, concluyó Cox, anticipando que en los próximos días se revelarán nuevos elementos sobre el caso.
Las autoridades continúan recopilando información clave para esclarecer los motivos detrás del crimen y determinar las responsabilidades legales correspondientes.
Este caso ha generado gran atención nacional, no solo por la figura pública de la víctima, sino también por los elementos sociales y digitales que rodean al presunto autor.
