Tenn.- Las graves inundaciones que azotaron el condado de Cocke obligaron a las autoridades a evacuar completamente la cárcel el pasado fin de semana. El sheriff CJ Ball informó que los 142 reclusos fueron trasladados a instalaciones carcelarias de los condados de Jefferson y Sevier para garantizar su seguridad y bienestar.
Los daños causados por el agua y el moho en la cárcel del condado de Cocke son tan extensos que se estima que tomará al menos dos meses antes de que pueda ser habitada nuevamente. El sótano de la cárcel quedó completamente inundado, destruyendo archivos importantes y suministros.
Para aliviar la sobrepoblación en las cárceles de los condados vecinos, las autoridades están explorando la posibilidad de liberar a un pequeño número de reclusos que han cometido delitos menores y están próximos a cumplir su condena. Sin embargo, se enfatiza que solo se considerarán casos que no representen una amenaza para la seguridad pública.
El sheriff Ball destacó la solidaridad entre los condados de la región, señalando que la colaboración entre las agencias encargadas de hacer cumplir la ley ha sido fundamental para enfrentar esta crisis.
