Atlanta, Georgia. Recientemente, los medios locales reportaron que dos exempleados de Amazon se declararon culpables de defraudar a Amazon por casi $10 millones durante su tiempo en la empresa.

Se dijo que el fiscal federal Ryan K. Buchanan expresó que Kayricka Wortham de Atlanta y Demetrius Hines de Smyrna usaron sus puestos en la empresa para enviar facturas falsas a proveedores falsos. Esto provocó que Amazon pagara aproximadamente $9.4 millones a la pareja y sus cómplices.

Cabe destacar que Hines fue un líder de múltiples sitios de prevención de pérdidas en el almacén de Smyrna y en otros sitios de la compañía. En su cargo, el sujeto era responsable de prevenir pérdidas, monitorear los riesgos de seguridad y proteger a las personas, los productos y la información en Amazon.

Se indicó que aproximadamente desde agosto de 2020 hasta marzo de 2022, Wortham trabajó como gerente de operaciones en el almacén de Amazon en Smyrna. Supervisó a otros y aprobó nuevos proveedores y el pago de las facturas de los proveedores.

“Los acusados ​​abusaron de sus puestos de confianza para robar casi $10 millones de la empresa en el transcurso de unos pocos meses”, precisó Buchanan. Además, el fiscal declaró: “Este asombroso fraude fue alimentado por pura codicia, como lo demuestran las propiedades inmobiliarias de alta gama, los automóviles de lujo y las joyas caras que los acusados ​​acumularon rápidamente con sus ganancias fraudulentas”.

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Los fiscales dijeron que se proporcionó información falsa del proveedor a subordinados que desconocían y les pidió que ingresaran la información en el sistema de proveedores de Amazon. Una vez que se ingresó la información, Wortham aprobó a los proveedores falsos, lo que permitió que esas cuentas de proveedores enviaran facturas a Amazon.

Mencionaron que en total, Wortham y sus cómplices recibieron alrededor de $9.4 millones del plan, según el comunicado.

“Estos acusados ​​intentaron ocultar su esquema a simple vista usando sus funciones únicas dentro de su empresa para ocultar las acciones de las que se beneficiaron de manera fraudulenta”, reveló Steven Baisel, quien es agente especial a cargo del Servicio Secreto de EE.UU. en Atlanta.

Cabe destacar que los funcionarios aseguraron que usaron las ganancias para comprar bienes raíces, autos de lujo y joyas caras.

Por su parte, Wortham y Hines se declararon culpables de conspiración para cometer fraude electrónico. Se espera que ambos sean sentenciados en marzo de 2023.

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