El domingo por la noche, un grupo de desconocidos perpetró un violento ataque con explosivos contra un cuartel de la Policía Estatal de Guerrero, ubicado en el puerto de Acapulco, en el sur de México.
Este incidente se suma a un fin de semana marcado por la escalada de violencia en la región, con el hallazgo de varios cuerpos desmembrados en lugares públicos.
Según información de las autoridades ministeriales, los agresores lanzaron petardos contra la sede policial, que se encuentra junto al Centro de Readaptación Social (Cereso) de Acapulco, alrededor de las 6:00 p.m. (hora local).
Se ha informado que dos de los explosivos detonaron en los dormitorios de los policías, mientras que el tercero cayó en el patio de la instalación.
Te puede interesar: En México no se espía a nadie: AMLO
Este ataque ocurre en medio de la disputa entre diferentes grupos delictivos que operan en el puerto, en un contexto donde las autoridades federales y estatales han intensificado sus esfuerzos en materia de seguridad.
Durante el mes de junio, se registraron 77 homicidios dolosos en Acapulco, reflejando la grave situación de inseguridad en la zona.
Durante el mismo fin de semana, las autoridades reportaron el macabro hallazgo de siete cadáveres en distintos puntos de la ciudad de Acapulco.
Tres cuerpos sin vida fueron descubiertos en la cajuela de un taxi la noche del sábado, mientras que los otros cuatro fueron encontrados el domingo en diferentes localidades de la región.
Acapulco, conocido por sus costas en el Pacífico, forma parte del convulso estado de Guerrero, afectado por la actividad de diversos cárteles del narcotráfico. Las cifras oficiales revelan una alarmante estadística de 180,609 homicidios ocurridos entre diciembre de 2018 y febrero de 2024, durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, con un promedio diario de 95 casos.
