Los Ángeles, California.– Una tragedia sacudió a la comunidad hispana de Los Ángeles el pasado viernes, cuando una niña de siete años, identificada como Rebecca Castellanos, falleció presuntamente a manos de su madre.
El informe del médico forense reveló que la menor falleció por asfixia debido a compresión del cuello y ahogamiento, en el interior de la bañera de su hogar ubicado en un complejo de apartamentos.
La principal sospechosa del homicidio es Graciela Castellanos, madre de la niña, quien según su pareja atravesaba una profunda crisis mental, agravada por un cuadro de depresión y trastorno bipolar.
Estoy seguro que estaba fuera de sí misma cuando atacó a la niña, expresó su compañero sentimental.
Vecinos, consternados por el hecho, han colocado un altar con flores y veladoras en honor a la pequeña víctima.
Mientras tanto, Graciela Castellanos permanece detenida en una cárcel local bajo una fianza de dos millones de dólares, en espera de que avance la investigación por homicidio.