Las autoridades penitenciarias de Costa Rica lograron atrapar a un gato doméstico que intentaba introducir droga en la Penitenciaría de Pococí.
El felino llevaba adheridos a su cuerpo dos paquetes con sustancia ilícita: 8.31 onzas de marihuana y 2.39 onzas de pasta de crack, según informó el Ministerio de Justicia y Paz.
El suceso ocurrió a comienzos de mayo, cuando los guardias de vigilancia detectaron un bulto sospechoso en el pelaje del gato mientras cruzaba el muro perimetral de la cárcel. Tras su captura, los oficiales descubrieron que llevaba envueltos en tela adhesiva los paquetes con droga, además de dos pliegos de papel para enrollar cigarrillos.
Un video divulgado por el Ministerio muestra a uno de los agentes atrapando al animal, un gato blanco con manchas negras, en una reja. En la grabación se aprecia también el momento en que los oficiales retiran cuidadosamente la droga del cuerpo del felino, que fue apodado en redes sociales como “Narco-Michi”.
El Ministerio destacó que, gracias a la rápida acción de los policías penitenciarios, se evitó que la droga ingresara a la cárcel. El animal fue entregado al Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa), que se encargará de su evaluación y resguardo.
Las autoridades continúan investigando si el felino de Pococí fue entrenado para esa tarea o si fue manipulado por personas externas para ingresar los estupefacientes al penal.
