Nashville, Tennessee.- Jacqueline, una joven madre en estado de gestación y madre de dos menores , se encuentra devastada tras la trágica pérdida de su esposo, Jacobo Hernández, en un accidente automovilístico el pasado 4 de julio.
La pareja y sus pequeños hijos se dirigían a presenciar los fuegos artificiales en el centro de Nashville como parte de las celebraciones del Día de la Independencia de los Estados Unidos, cuando ocurrió el fatídico incidente en la Interestatal 40.
Jacobo Hernández, de 29 años, perdió el control de su vehículo y fue arrollado por otro automóvil. El conductor responsable fue detenido recientemente después de que las autoridades determinaron que manejaba a exceso de velocidad al momento del choque.
Jacqueline, quien también resultó herida, ha enfrentado numerosos desafíos desde aquel día, tanto físicos como emocionales. Tras la tragedia, fue desalojada de su hogar, agravando aún más su situación. «Estoy esperando a mi bebé. Ha sido un momento muy difícil. Solo Dios me ha sostenido porque ahora no tengo a mi esposo, quien era el que respondía por nosotros», expresó la mujer.
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Las autoridades lograron detener al conductor tras varios meses de seguimiento, lo que ha sido un pequeño consuelo en medio del inmenso dolor de la familia. Jacqueline, quien viajaba con Jacobo y sus hijos el día del accidente, sufrió múltiples fracturas que han requerido varias cirugías. «He tenido todo tipo de fracturas en la cara, en el brazo. Ha sido difícil porque estoy embarazada, pero gracias a Dios el bebé está bien», comentó la joven madre.
A pesar de las adversidades, la captura del responsable brinda a la familia la esperanza de que se haga justicia por la imprudencia que les arrebató a Jacobo. Para aquellos que deseen apoyar a Jacqueline en este difícil momento, pueden hacer una donación a través de Zelle al número 615-593-7430.
