Remontando cinco carreras en contra, los Dodgers de Los Ángeles vencieron este miércoles 7×6 en la cancha de los Yankees de Nueva York y se proclamaron campeones de la Serie Mundial de 2024 por un global de 4-1.
En un último duelo de infarto, el equipo angelino igualó primero un 0x5 inicial de los Yankees y después remontó de nuevo con dos carreras en la séptima entrada.
Los Dodgers, liderados esta temporada por la superestrella japonesa Shohei Ohtani, celebraron así el octavo título de su historia y primero desde 2020.
«¿Quién quiere un desfile?», clamó al recibir el trofeo Dave Roberts, entrenador de los Dodgers, quienes no pudieron celebrar su último título por las restricciones por la pandemia de covid-19.
«Tuvimos una gran temporada, con muchas adversidades. Muchos no contaban con nosotros pero estos chicos creyeron el uno en el otro y siguieron luchando, y ahora somos campeones», les reconoció el técnico.
Del otro lado los Yankees, la franquicia más laureada de las Grandes Ligas con 27 trofeos, alargan una sequía que se prolonga desde 2009 con esta dolorosa derrota ante sus grandes rivales angelinos.
‘Los Bombarderos del Bronx’, que el martes habían logrado una contundente primera victoria, fallaron en su intento de ser el primer equipo en remontar un 3-0 en contra.
Yankees y Dodgers, las franquicias más populares de ‘Las Mayores’, no se enfrentaban en una Serie Mundial desde 1981, cuando también triunfaron los angelinos con su legendario lanzador mexicano Fernando Valenzuela, fallecido en la antesala de esta final.
Los Dodgers suman ahora cuatro victorias en los 12 ‘Clásicos de Otoño’ jugados ante los Yankees y miran con optimismo al futuro con un poderoso plantel encabezado por Ohtani, el gran fichaje de esta campaña, y Freddie Freeman, quien recibió el premio MVP (Jugador Más Valioso).
Freeman, que ganó su segundo título tras el de 2021 con Atlanta, encadenó jonrones en los cuatro primeros partidos de la serie incluido un Grand Slam que dio la victoria a Dodgers en el juego inaugural en ‘extra innings’.
– Explosiva quinta entrada –
El epílogo del miércoles estuvo a la altura de una Serie Mundial mucho más disputada de lo que indica el marcador global.
Los Yankees, que en los dos primeros juegos tuvieron opciones hasta la última entrada, arrancaron el quinto partido con la misma intensidad y poder de fuego.
Su superestrella Aaron Judge, que hasta el martes no había conectado un hit, conectó un jonrón de dos carreras en la entrada inicial.
Al bombazo de ‘El Juez’ le siguió otro cuadrangular solitario de Jazz Chisholm Jr en medio del júbilo de los 49.263 espectadores, incluidos los actores los actores John Travolta y Jeremy Allen White.
Los ‘Bombarderos del Bronx’ siguieron asediando al lanzador Jack Flaherty y el mexicano-estadounidense Alex Verdugo pegó un sencillo para que Anthony Volpe pasara por la registradora en el ‘segundo ‘inning’.
El entrenador de los Dodgers, Dave Roberts, reaccionó de inmediato retirando de la lomita a Flaherty. El éxtasis en las gradas se desató cuando Giancarlo Stanton conectó otro cuadrangular que daba cinco carreras de ventaja a los Yankees en la tercera entrada.
El equipo neoyorquino tenía ya la cabeza en el sexto juego del viernes cuando le pusieron en bandeja la remontada a los Dodgers con una cadena de fatídicos errores en el quinto ‘inning’.
Un fallo del propio Judge al intentar atrapar un pelotazo y otro posterior de Volpe en un tiro a tercera permitió que los Dodgers tuvieran casa llena sin outs.
– Pánico en las gradas –
El lanzador Gerrit Cole, hasta entonces impecable, ponchó a Gavin Lux y a Ohtani pero después se contagió de los fallos.
Cole no cubrió la primera base ante Mookie Betts y el puertorriqueño Kiké Hernández inauguró la pizarra de los angelinos desatando una avalancha de los visitantes.
Freeman bateó a continuación un sencillo que remolcó carreras de Edman y Will Smith. Los Dodgers no soltaron a su presa y empataron el marcador después de un batazo hasta la barda del dominicano Teoscar Hernández.
El pánico se adueñó de las gradas pero los Yankees se mantuvieron en pie. Soto restableció la ventaja en la sexta entrada y Cole enderezó el rumbo en la lomita.
Los problemas para los Yankees regresaron en la octava cuando el relevista Tommy Kahnle permitió que los Dodgers llenaran bases y Kiké Hernández y Tommy Edman dieran el último vuelco en la pizarra.
Roberts recuperó al lanzador Walker Buehler, figura del tercer partido, para finiquitar los últimos tres outs de esta emocionante Serie Mundial.
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