MÉXICO.- El cuerpo del empresario veracruzano César Eduardo Garrido Celaya, de 24 años de edad, quien fue levantado la madrugada del 8 de septiembre afuera del restaurante “Mochomos”, en el centro comercial Solesta, fue abandonado junto con un carro al que le prendieron fuego frente al Complejo de Seguridad Metropolitano, conocido como C-5.
El domingo, se dio a conocer que César Eduardo, quien es originario de Coatzacoalcos y se dedica a la compra-venta de autopartes, se encontraba afuera del restaurante, discutiendo con su pareja, cuando cinco sujetos armados llegaron a bordo de una camioneta y se lo llevaron por la fuerza.
Luego, la madrugada de este lunes, hombres no identificados llevaron un carro Aveo a las afueras del C-5, ubicado en el periférico Ecológico, en el municipio conurbado de Cuautlancingo, al cual estacionaron y le prendieron fuego.
Antes de eso, estos sujetos sacaron una hielera con una cartulina que supuestamente tenía una amenaza firmada por el grupo “Operaciones Especiales Mencho”, en cuyo contenido había restos humanos que, ahora se sabe, correspondían al empresario veracruzano.
En un mensaje divulgado en sus redes sociales, el gobernador Salomón Céspedes Peregrina confirmó que el levantón de Garrido Celaya y los restos que fueron abandonados frente al Complejo de Seguridad Metropolitana, tienen “una clara conexión”.
“Todo apunta a un ataque directo. Continúan las investigaciones con el fin de determinar el móvil y proceder conforme a la ley. He instado a la Fiscalía General del Estado a que el caso se clarifique, con el fin de brindarle certeza a la sociedad poblana”, escribió el mandatario en su cuenta X.