La NASA informó que el asteroide YR4 podría impactar con la Tierra en el año 2032. Según los cálculos más recientes, las probabilidades actuales de que choque con nuestro planeta pueden sonar ínfimas, solo de 2,3%. Sin embargo, este mínima chance no ha sido impedimento para que la Organización de Naciones Unidas (ONU) levante una alerta global para seguir más de cerca su trayectoria.
Desde el sitio Infobae añaden que el objeto, que tiene un diámetro estimado de entre 40 y 90 metros, ha sido clasificado por su nivel de peligrosidad en el nivel 3 de la escala de Turín, lo que merece un monitoreo constante por parte de las autoridades.
El coordinador de la Oficina de Defensa Planetaria de la NASA, Juan Luis Cano, detalló al respecto que «se está simplemente informando que, como expertos y por nuestros protocolos, tenemos que poner una atención especial a este asteroide particular».
¿En qué países podría impactar el asteroide YR4 en 2032?
En el caso hipotético de que sucediera tal impacto, el astrónomo Daniel Bamberger calculó que la posible zona de colisión va desde el este del océano Pacífico hasta el sur de Asia, pasando por Sudamérica y África.
El científico agregó también que el supuesto impacto se podría producir en una franja de la Tierra que va desde Colombia, Venezuela y norte de Brasil, hasta la zona media de África, India y hasta Myanmar. Esa trayectoria incluye mucho mar, pero también zonas muy pobladas.
El astrónomo Diego Bagú explicó al citado medio que «en caso de impactar con la Tierra, no produciría una tragedia a escala global, como sí ocurrió, por ejemplo, hace unos 65 millones de años, momento en que un asteroide de unos nueve o diez kilómetros de diámetro impactó en lo que hoy es la península de Yucatán y provocó la desaparición de más del 90% de las especies vegetales y animales, entre ellas los dinosaurios”.
“Pero un objeto de este tipo sí produciría, por ejemplo, un tremendo daño en la zona en la que impacta el registro más cercano que tengamos de un fenómeno de este tipo del cual se tenga conocimiento. Ocurrió en 1908, hace un poco más de 100 años en Tunguska, en el norte de la Siberia rusa. En el momento en que un asteroide de unos 50 metros ingresó en la atmósfera y si bien no impactó con la superficie de la Tierra porque fue tal la presión y la temperatura que levantó en la atmósfera terrestre que explotó, y la onda expansiva derribó toda una zona boscosa en más de 2100 hectáreas que quedaron absolutamente diezmadas por la onda expansiva de la explosión de un asteroide de este tipo”, complementó el astrónomo.