Estudios recientes ponen en duda la creencia popular de que la luz azul emitida por las pantallas de los dispositivos electrónicos interrumpe el sueño.
Investigaciones realizadas en Australia, Gran Bretaña y Estados Unidos no han encontrado una correlación directa entre la exposición a esta luz y la dificultad para conciliar el sueño. Esto contradice las recomendaciones de algunos organismos de salud pública, como el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS), que aconsejan evitar el uso de dispositivos electrónicos una hora antes de acostarse.
La luz azul es un tipo de luz visible que se encuentra en el extremo azul del espectro de luz. Su fuente principal es el sol, pero también la emiten pantallas como las de smartphones, tablets y ordenadores.
Se cree que la luz azul suprime la producción de melatonina, una hormona que regula el ciclo de sueño-vigilia y nos induce al sueño.
- Estudios contradictorios:
- Algunos estudios no han encontrado una relación significativa entre la exposición a la luz azul de las pantallas y la calidad del sueño.
- Otros estudios sí han encontrado una asociación negativa, pero con efectos considerados como pequeños.
- Factores a considerar:
- La cantidad de luz azul emitida por las pantallas varía según el dispositivo.
- El tiempo de exposición a la luz azul antes de acostarse también es importante.
- Otros factores, como el estrés o la ansiedad, también pueden afectar el sueño.
Russell Foster, profesor de neurociencia del sueño en la Universidad de Oxford, considera que la cantidad de luz azul emitida por las pantallas es relativamente baja y que el problema principal es el uso excesivo de los dispositivos en general, no la luz azul en sí misma.
Michael Gradisar, psicólogo clínico australiano, analizó 11 estudios sobre el tema y concluyó que no hay evidencia suficiente para afirmar que la luz azul de las pantallas dificulta el sueño.
Los expertos coinciden en que es importante mantener una buena higiene del sueño, que incluye evitar el uso de dispositivos electrónicos antes de acostarse. Se debe priorizar un ambiente de sueño adecuado, con poca luz y ruido. Si se tienen problemas para dormir, es importante consultar con un médico.
