El defensa internacional inglés Kyle Walker, a quien todavía le quedaba un año de contrato con el Manchester City, fichó el sábado por el recién ascendido Burnley con un contrato por dos años.
En los Clarets se reunirá junto a su excompañero en el Tottenham y en la selección, el ahora entrenador Scott Parker, quien logró el ascenso del Burnley tras una temporada en Championship.
«Cuando hablé con Scott y le oí hablar de su proyecto para la próxima temporada, aproveché la oportunidad. Ha hecho un trabajo extraordinario aquí, llevando al equipo a Premier League con un total de 100 puntos (en 46 partidos), y ahora estamos impacientes, de volver juntos al mejor campeonato del mundo», comentó Walker.
Con 96 partidos como internacional y 410 disputados en Premier League, el lateral derecho de 35 años sigue siendo un referente en su puesto, pese a haber estado por debajo de su nivel la pasada temporada.
En enero salió cedido al AC Milan, una aventura sin éxito ya que los Rossoneri no activaron la cláusula de compra de la que disponían. Walker tenía todavía un año de contrato, hasta 2026, con el Manchester City.
A las órdenes de Pep Guardiola acumuló un enorme palmarés, con seis Premier League, dos Copas de Inglaterra y una Liga de Campeones, la primera del club, conquistada en 2023.
Según la prensa británica, el Burnley habría pagado cerca de 5 millones de libras (5,8 millones de euros) para hacerse con los servicios del veloz lateral, de vocación ofensiva.
Formado en el Sheffield United, Walker llegó al Manchester City en 2017 procedente del Tottenham.
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