Roswell, Nuevo México.- Las autoridades locales han reportado el fallecimiento de al menos dos personas y decenas de heridos como resultado de las devastadoras inundaciones que han azotado la ciudad de Roswell desde la noche del sábado. El fenómeno climático, debido a intensas lluvias, ha llevado a un esfuerzo de rescate histórico en la región.
Según informes de la Guardia Nacional de Nuevo México, alrededor de 38 personas han sido trasladadas a hospitales para recibir atención médica por diversas lesiones relacionadas con las inundaciones.
Estos eventos climáticos extremos han marcado un hito en la historia meteorológica de Roswell, ya que el pasado 19 de octubre se registraron 5.78 pulgadas (14.7 centímetros) de lluvia en un solo día, superando el récord anterior de 5.65 pulgadas (14.6 centímetros) establecido el 1 de noviembre de 1901. Las inundaciones repentinas resultantes de esta tormenta han causado estragos en la comunidad.
Hasta la fecha, se han llevado a cabo rescates masivos, con más de 309 personas rescatadas desde el inicio de la crisis. La Guardia Nacional ha intensificado sus operaciones en colaboración con otras agencias de emergencias para garantizar la seguridad de los ciudadanos. “Hemos trabajado toda la noche y continuaremos haciéndolo hasta que todos estén a salvo”, afirmó el mayor general Miguel Aguilar.
A medida que los equipos de rescate siguen en acción, los meteorólogos han alertado sobre la posibilidad de más lluvias en los próximos días, lo que podría agravar aún más la situación. Por ello, todos los accesos a Roswell han sido cerrados por las autoridades, quienes han establecido un refugio para las personas afectadas en los terrenos de la Feria del Este de Nuevo México.
La policía estatal ha mantenido un despliegue constante de 57 efectivos en el área para ofrecer apoyo continuo a la población. «Estamos comprometidos a ayudar a Roswell todo el tiempo que sea necesario”, señaló un portavoz de la fuerza policial local.
