Cientos de personas en el norte de California y el centro de Oregón se vieron obligadas a evacuar sus hogares debido a la propagación de incendios forestales, avivados por el clima seco y una intensa ola de calor.
En el condado de Napa, California, el incendio Pickett, que abarca cerca de 26 kilómetros cuadrados, ha llevado a la evacuación de aproximadamente 150 personas, con advertencias para otras 360.
El fuego amenaza cerca de 500 estructuras en las áreas de Aetna Springs y Pope Valley. Más de 1,230 bomberos, apoyados por helicópteros, trabajan para contener las llamas, que están contenidas en un 11%.
En Oregón, el incendio Flat ha crecido hasta casi 75 kilómetros cuadrados, afectando a unos 4,000 hogares con algún tipo de aviso de evacuación. De estos, 1,000 tienen órdenes de evacuación inmediata. Las altas temperaturas y la baja humedad complican las labores de los bomberos.
Las autoridades aún investigan las causas de ambos incendios, pero señalan que el clima extremo ha jugado un papel fundamental. Se espera que las condiciones sigan siendo un desafío para los equipos de emergencia.