El huracán Helene tocó tierra y fue rebajado a tormenta tropical mientras avanza hacia el interior de Florida y Georgia, después de hacer su aterrizaje en la costa de estadounidense el jueves por la noche.
Según un primer reporte este fenómeno meteorológico ha dejado a su paso al menos tres víctimas fatales en Florida y seis en Georgia, este último estado dos personas perdieron la vida en el condado de Laurens, una por la caída de un árbol y la otra en un accidente automovilístico; en el condado de Jeff Davis murieron dos por la caída de árboles, y otras dos fallecieron en el condado de Wheeler.
Sin embargo, horas más tarde el gobernador de Georgia, Brian Kemp, adelantó que los muertos en su entidad aumentaron a 11 y que se espera a que se de un número exacto de heridos.
“Esta ha sido una tormenta mortal”, dijo Kemp en una rueda de prensa para informar sobre los daños causados por el ciclón tropical.
Por otro lado, En la noche del jueves, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, dio a conocer que una persona había fallecido cuando un cartel cayó sobre su automóvil.
DeSantis expresó en una conferencia de prensa: “Vamos a despertar en un estado donde es muy probable que haya habido más pérdidas de vidas y ciertamente habrá pérdidas de propiedades”.
En Perry, Florida, los fuertes vientos y las lluvias arrancaron revestimientos de los edificios, varias viviendas terminaron destrozadas y gran parte de la ciudad terminaron sin electricidad. En el condado de Citrus, a 193 kilómetros de Perry, varias personas quedaron atrapadas por las inundaciones.
La oficina del sheriff advirtió en Facebook: «Si está atrapado y necesita ayuda, llame a los rescatistas. No intente pisar las aguas de la inundación (…) El agua puede contener cables con corriente, aguas residuales, objetos afilados y otros escombros», publicaron.
Helene llegó como huracán 4 con vientos máximos de hasta 225 km/h (140 mph), según el último informe del Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.
A las 5:00 de la mañana (hora local) de este viernes, el NHC indicó que, aunque Helene ha perdido intensidad, las ráfagas de viento aún podrían alcanzar hasta 110 km/h (70 mph) en los terrenos elevados de los Apalaches del sur. Se insta a los residentes de estas áreas a prepararse para posibles cortes prolongados de electricidad.
De hecho, hasta la publicación de esta pauta informativa, más de dos millones de usuarios en Florida, Georgia, Carolina del Norte y Carolina del Sur se encuentran sin suministro eléctrico, según datos de poweroutage.us.
Aunque la tormenta ha cambiado de categoría, el NHC advierte que se mantengan las precauciones ante la posibilidad de marejadas ciclónicas en las costas y lluvias torrenciales, condiciones que siguen ofreciendo un riesgo significativo para la seguridad.
Los estados afectados, incluyendo Florida, Georgia, Carolina del Sur, Carolina del Norte, Virginia y Alabama, se mantienen bajo avisos de emergencia mientras se evalúan los daños provocados por Helene, el quinto huracán de la temporada en el Atlántico.