El joven colombiano Ángel Barajas, de 17 años, logró clasificarse para la final de barra fija tras terminar sexto en la primera jornada de competición de la gimnasia artística de los Juegos Olímpicos de París.
El atleta de Cúcuta, que es el de menor edad de todo el torneo masculino, consiguió entrar en la final gracias a los 14.466 puntos que los jueces dieron a su ejercicio en la barra fija, con los que consiguió el billete para la decisión del 5 de agosto.
«Si logro estar en una final es algo histórico para la gimnasia colombiana», explicó satisfecho tras competir, cuando aún debía conocer el resultado de la última tanda de atletas para saber si conservaba su plaza entre los ocho primeros.
«Creo que hice una buena actuación, a pesar de ser mis primeros Juegos Olímpicos», valoró sonriente. «Gracias a Dios puede cumplir este sueño, esta meta que de hace mucho tiempo tenía y lo pude lograr a mi corta edad», agregó el gimnasta colombiano, que sin embargo quedó fuera de la final de barras paralelas.
Con un sólido potencial, la carrera internacional de Barajas no deja de tomar vuelo desde que el año pasado se convirtió en el primer colombiano en proclamarse campeón del Mundo junior, con su oro en barras paralelas.
Más tarde conseguiría su precoz plaza para disputar los Juegos Olímpicos de París, donde busca aprender el máximo, con la vista puesta en una carrera que espera sea de largo recorrido.
«No sabía cómo era todo esto, pero la verdad es algo muy bonito, nunca imaginé que el gimnasio fuera a estar así de lleno», valoró.
«Ese tipo ambiente me gusta, pero también se siente un poco la presión», reconoció sobre la atmósfera en la Arena Bercy de París, prácticamente llena en esta primera jornada de competencias.
Barajas, una de las grandes promesas de la gimnasia sudamericana, consigue así seguir los pasos de su admirado Jossimar Calvo, originario también de Cúcuta, que en Rio fue el primer gimnasta colombiano en disputar una final olímpica.
Fuente de inspiración y apoyo para Barajas, Calvo no logró clasificar para los que hubieran sido sus segundos Juegos.
«Antes de pasar a la sala de competencia, me acordé de que yo quería estar aquí con él, porque los dos teníamos ese sueño acompañarnos a los Juegos Olímpicos», recordó Barajas sobre su referente.
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