Fulton, Georgia.- En respuesta a la inminente amenaza que representa la tormenta tropical Helene, el gobernador de Georgia, Brian Kemp, ha declarado un estado de emergencia efectivo desde este martes.
Se espera que Helene se intensifique en un huracán de categoría 3, con vientos sostenidos que podrían alcanzar las 130 millas por hora, según reportes del Centro Nacional de Huracanes (NHC).
La suspensión del estado de emergencia se prevé hasta la medianoche del 2 de octubre, permitiendo que las agencias gubernamentales movilicen recursos y preparativos necesarios para mitigar el impacto de la tormenta. La trayectoria actual indica que Helene tocará tierra en la región de Big Bend, Florida, antes de avanzar hacia el estado de Georgia, afectando gravemente a varias áreas.
El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido alertas por posibles inundaciones, especialmente en zonas metropolitanas de Atlanta y en el noroeste del estado. Las proyecciones meteorológicas anticipan que Georgia podría enfrentar lluvias torrenciales entre 4 y 8 pulgadas, así como vientos de tormenta tropical que oscilarán entre 39 y 73 millas por hora. Además, existe el riesgo de tornados en algunas áreas.
El gobernador Kemp instó a los residentes a prepararse y seguir las orientaciones de las autoridades locales.
«Es fundamental que todos los georgianos tomen las precauciones necesarias y permanezcan informados durante el paso de esta tormenta. Trabajaremos de la mano con las agencias de emergencia para garantizar la seguridad y el bienestar de nuestros ciudadanos”, declaró Kemp.
Los habitantes de Atlanta y sus alrededores deben estar alerta ante las condiciones climáticas adversas previstas para el jueves y viernes, cuando se espera el mayor impacto de Helene.