Una compañía eléctrica asumió el jueves su responsabilidad en el inicio del mayor incendio forestal en la historia de Texas, sur de Estados Unidos, mientras los bomberos avanzaban en la contención de otros siniestros activos que aún afectan al estado.
El incendio denominado Smokehouse Creek se inició hace casi dos semanas, ha causado la muerte de dos personas y destruido hasta el momento 428.700 hectáreas en el norte de Texas. De acuerdo con el último reporte del Servicio Forestal de Texas A&M, entidad que enfrenta la emergencia, el siniestro está contenido en un 74%. Los daños en infraestructura y ganado aún no han sido cuantificados.
«Según la información disponible actualmente, Xcel Energy reconoce que sus instalaciones parecen haber estado involucradas en el inicio del incendio de Smokehouse Creek», dijo en un comunicado la compañía eléctrica con sede en Minneapolis pero con actividad en varios estados del país. En Texas opera con su subsidiaria Southwestern Public Service Company.
Según reportes de prensa, una persona que residía cerca de la ciudad de Canadian, una de las afectadas por este incendio, demandó recientemente a la firma, responsabilizándola por la destrucción de su vivienda. De acuerdo con su reclamo, el problema pudo haber radicado en postes de madera que no recibieron mantenimiento.
La firma rechazó acusaciones de haber sido negligente en el cuidado y operación de su infraestructura y estableció un mecanismo para que las personas cuyas viviendas resultaron afectadas presenten sus reclamos. Xcel Energy también negó responsabilidad en otro de los incendios forestales en el área.
De acuerdo con el servicio forestal del estado, otros dos incendios aún permanecían «activos» este jueves, localizados en la zona conocida como Panhandle (mango de sartén, en español), bautizada así debido a la forma que tiene en el mapa esta área cuadrada en la parte superior. Ambos estaban cerca de ser contenidos en su totalidad.
mav/nn
© Agence France-Presse
