Dublín, Irlanda — D. J. Carey, el aclamado exjugador de hurling irlandés de 54 años, se ha declarado culpable de estafar a personas con afirmaciones fraudulentas sobre un tratamiento contra el cáncer que nunca padeció. La noticia, que ha conmocionado al mundo deportivo y al público en general, fue reportada este miércoles por medios locales.
Carey, una leyenda del hurling con nueve selecciones All-Star y cinco títulos sénior de All-Ireland con su equipo de Kilkenny, compareció ante el Tribunal Penal del Circuito de Dublín. Allí, se declaró culpable de 10 de los 21 cargos imputados en su contra.
Entre las acusaciones a las que Carey admitió su culpabilidad, se incluye haber inducido de manera deshonesta y mediante engaño al empresario Denis O’Brien a entregarle dinero para supuestamente financiar un tratamiento contra el cáncer. Estos actos tuvieron lugar en fechas no especificadas entre enero de 2014 y septiembre de 2022.
La jueza ha programado la vista para dictar sentencia el próximo 29 de octubre, manteniendo a Carey en libertad bajo fianza hasta entonces. El monto total de la estafa perpetrada por el exdeportista, ampliamente considerado uno de los mejores jugadores de hurling de la historia, no fue revelado durante el juicio.
Se ha hecho público que Carey llegó a utilizar el cable de un teléfono móvil iPhone, introduciéndoselo por la nariz, para simular su supuesta enfermedad y así estafar a miles de personas. Engañó a sus víctimas para que le enviaran dinero entre 2014 y 2022, asegurando que lo necesitaba para cubrir los costos de su tratamiento médico.
