El Departamento de Comercio de Estados Unidos anunció el martes que añadirá a unas 50 empresas, principalmente chinas, iraníes y emiratíes, a su lista de compañías hacia las cuales las exportaciones de semiconductores están limitadas o prohibidas.
Washington justifica esta decisión al señalar que las actividades de estas empresas son «contrarias a la política internacional y a la seguridad nacional de los Estados Unidos».
La inclusión en esta lista impone a las empresas estadounidenses la obtención de un acuerdo previo del gobierno para poder exportar semiconductores a las firmas señaladas.
«No permitiremos que los adversarios exploten la tecnología estadounidense para fortalecer sus propios ejércitos y amenacen vidas estadounidenses», dijo el secretario de Comercio Howard Lutnick en un comunicado.
El objetivo de la medida es sobre todo limitar el acceso a semiconductores estadounidenses por parte de empresas chinas sospechosas de estar vinculadas al ejército o a los servicios de inteligencia de Pekín.
Entre las nuevas empresas afectadas, la inmensa mayoría son chinas, con filiales en Taiwán, Sudáfrica o los Emiratos Árabes Unidos. Dos empresas, en China e Irán, están en la mira por haber intentado obtener piezas estadounidenses para ayudar en el desarrollo de los programas de drones de defensa iraníes.
Hasta ahora, Washington imponía restricciones a más de 150 empresas chinas, tanto para semiconductores como para los equipos necesarios para su producción.
En setiembre Pekín impuso restricciones contra Estados Unidos, sobre materiales y componentes necesarios para fabricar chips.
© Agence France-Presse