County Sumner, Tennessee.- Una llamada equivocada al servicio de emergencias 911 destapó ayer un insólito caso de robo que mantenía en alerta a las autoridades de Pensacola, Florida. El hecho ocurrió en condado de Sumner en Inn Motel, donde lo que parecía ser un simple error telefónico terminó develando un misterioso y particular hurto.
El agente Chartier, quien respondió al llamado, se encontró con Jacob Vanderburg en una de las habitaciones del motel. Si bien el sujeto insistía en que todo se trataba de una llamada accidental, su comportamiento nervioso y evasivo generó desconfianza al oficial.
Así fue, la intuición policial no falló. Durante la inspección de rutina, el agente descubrió, oculta bajo una manta, una cruz de madera que Vanderburg custodiaba con particular recelo. La pieza religiosa resultó ser el objeto de una investigación activa en Florida, donde las autoridades la buscaban tras su desaparición en circunstancias no esclarecidas.
Una verificación de antecedentes reveló que Vanderburg era más que un huésped desorientado: sobre él pesaba una orden de búsqueda en Florida por múltiples delitos, incluyendo hurto y allanamiento de morada.
Actualmente, Vanderburg se encuentra recluido en la cárcel del condado de Sumner, enfrentando cargos como fugitivo de la justicia, mientras la cruz recuperada permanece resguardada como evidencia del caso.