Cobb, Georgia.– En una operación reciente, la División de Atlanta de la Administración de Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos desmanteló un significativo laboratorio de metanfetamina ubicado en el corazón del condado de Cobb. La intervención se produjo después de una parada de tráfico realizada el lunes, que resultó ser el punto de partida para el descubrimiento de un centro de producción de drogas altamente peligroso.
Los agentes de la Patrulla Estatal de Georgia detuvieron a Anthony Revolorio, quien fue arrestado por utilizar su teléfono celular mientras conducía. Durante la inspección de su vehículo, las autoridades encontraron 10 kilogramos de metanfetamina, que lo llevaron a una vivienda en la cuadra 1900 de Pair Road, donde se realizó una redada que resultó en la confiscación de más de 500 kilogramos adicionales de la sustancia controlada.
«Al acercarnos a la casa, el olor era abrumador. Supimos de inmediato lo que íbamos a encontrar», declaró Robert Murphy, agente especial a cargo de la DEA en Atlanta. La rápida movilización de las fuerzas del orden pudo prevenir posibles incidentes, ya que los químicos empleados en la producción de metanfetamina son altamente volátiles y su manipulación inadecuada podría resultar en explosiones.
Además de Revolorio, las autoridades también arrestaron a Raúl Ernesto, otro sospechoso involucrado en la operación. Ambos individuos son inmigrantes guatemaltecos que se encuentran en Estados Unidos de manera ilegal. La DEA enfatizó la preocupante proximidad del laboratorio a diversas instituciones educativas, incluyendo nueve escuelas primarias, siete escuelas intermedias y nueve escuelas secundarias.
«La región metropolitana de Atlanta se ha convertido en un punto estratégico para la fabricación de drogas ilegales, y somos conscientes de la actividad de varios cárteles mexicanos que operan en el área», afirmó Murphy, destacando el compromiso de los federales por desmantelar estas redes delictivas.