Con 36 puntos de Jayson Tatum, los Boston Celtics derrotaron el sábado 114-111 a los Indiana Pacers en una remontada final que prácticamente selló su victoria en la Final de la Conferencia Este de la NBA.
Los Celtics, el mejor equipo de la fase regular, disponen ahora de una ventaja de 3-0 frente a unos Pacers que no cuentan por lesión con su estrella, Tyrese Haliburton.
Ninguna franquicia ha remontado un 3-0 en contra en la historia de los playoffs de la NBA.
La franquicia verde podría zanjar la barrida en el cuarto partido del lunes, que también se disputará en Indianápolis.
Este sábado, los Pacers dominaron prácticamente todo el partido, con ventajas de hasta 18 puntos, en un encomiable esfuerzo colectivo liderado por el escolta Andrew Nembhard (32 puntos y 9 asistencias) y el base suplente TJ McConnell (23 puntos y 9 rebotes).
Pero Tatum y el veterano pívot dominicano Al Horford, que logró 23 puntos y 7 triples, permitieron que Boston diera un acelerón en la recta final hasta ponerse por delante a sólo 38 segundos para el final con una canasta y tiro libre adicional de Jrue Holiday.
El propio Holiday acabó con las ilusiones del público de los Pacers, que compiten en su primera final de conferencia desde 2014, con un decisivo robo de pelota a Nembhard con sólo tres segundos en el reloj.
«Ninguna ventaja es segura ahora en la NBA. Siempre creímos que teníamos una oportunidad», subrayó Tatum, que ya acaricia sus segundas Finales de la NBA tras la derrota de 2022 ante los Golden State Warriors.
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