Montana.- Lo que inicialmente se reportó como un ataque de oso, resultó ser un homicidio premeditado con un desenlace trágico.
Dustin Kjersem, de 35 años, fue encontrado sin vida en su tienda de campaña el pasado 12 de octubre. Las heridas en su cuerpo eran tan severas que se sospechó inicialmente de un ataque de un animal salvaje. Sin embargo, una minuciosa investigación descartó esta hipótesis al no encontrar evidencia de la presencia de osos en la zona.
Las pesquisas condujeron a un sorprendente giro en la trama. Las autoridades identificaron a Daren Christopher Abbey, de 41 años, como el principal sospechoso. Según las declaraciones de Abbey, llegó al campamento con la intención de pasar la noche, pero se encontró con Kjersem, a quien no conocía previamente.
Lo que parecía ser un encuentro casual entre dos desconocidos, se transformó en una tragedia. Abbey, por motivos aún desconocidos, atacó brutalmente a Kjersem, golpeándolo con un trozo de madera, apuñalándolo con un destornillador y asestándole golpes con un hacha. La violencia del ataque fue tal que Kjersem no tuvo oportunidad de defenderse.
La evidencia que llevó al arresto de Abbey fue crucial. Una lata de cerveza encontrada en el campamento contenía su ADN, lo que permitió a las autoridades rastrearlo y detenerlo en Butte, Montana. Abbey fue detenido y puesto bajo una fianza de 1.5 millones de dólares.
