MÉXICO.- Habitantes del ejido J. Cruz Gálvez, ubicado a 25 kilómetros de Hermosillo, Sonora, quedaron sorprendidos luego que se formara una enorme grita que se tragó a unos becerros sin dejar rastro de ellos.
Los hechos ocurrieron en un área llamada ‘El Caporal’ donde se formó la enorme grieta que se tragó a los becerros en momentos que buscaban alimento.
Las enormes grietas en el desierto de Sonora, que a veces se conocen como ‘fisuras’ o ‘fracturas’, se deben a varios factores geológicos y climáticos.
Expansión y contracción del suelo.
Temperaturas extremas: En el desierto de Sonora, las temperaturas pueden variar drásticamente entre el día y la noche. Esta expansión y contracción térmica del suelo puede causar el agrietamiento de la superficie.
Humedad y sequedad: Las variaciones en la humedad también pueden afectar la integridad del suelo, contribuyendo a la formación de grietas.
Erosión y sedimentación.
Erosión del viento: Los fuertes vientos en el desierto pueden erosionar la superficie terrestre, eliminando capas superiores de sedimentos y dejando grietas.
Erosión por agua: Aunque el desierto es árido, cuando llueve, el agua puede erosionar el suelo y formar grietas y fisuras en el terreno.
Las grietas en el desierto de Sonora son el resultado de una combinación de factores naturales y, en algunos casos, humanos, que afectan la estabilidad y estructura del suelo en esta región árida.