Taylor Swift desató rumores de un posible embarazo tras su enigmática llegada al Arrowhead Stadium para presenciar el partido entre los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles, equipo en el que juega su prometido, Travis Kelce.
Aunque no es habitual, la superestrella del pop se mostró mucho más reservada de lo común, lo que generó especulaciones sobre su vida privada, como lo es sería un embarazo, por lo que ha decidido alejarse de los medios de comunicación.
En otras ocasiones, la intérprete disfrutaba de una visibilidad total y de múltiples apariciones en cámara, pero ahora ha gozado de mayor privacidad.
Un video capturado por los asistentes al evento deportivo, y ampliamente difundido en redes sociales, se aprecia a la artista de 35 años entrando al estadio con el rostro cubierto por una pared desplegable.