Washington, D.C.- Un grupo de doce legisladores demócratas, entre ellos destacadas figuras del Caucus Hispano del Congreso, presentó una demanda ante un tribunal federal en el Distrito de Columbia contra la Administración del presidente estadounidense Donald Trump, acusándola de obstaculizar el acceso a centros de detención de migrantes y limitar sus facultades de supervisión.
Los demandantes alegan que el Ejecutivo impidió visitas sin previo aviso —un derecho reconocido por la ley estadounidense— a instalaciones donde se albergan migrantes bajo custodia federal. Estas restricciones, sostienen, comprometen la transparencia institucional y dificultan la verificación de las condiciones bajo las que viven miles de personas retenidas, algunas de ellas incluso con ciudadanía estadounidense.
“Negar la supervisión del Congreso es una amenaza directa a los principios democráticos y al equilibrio constitucional de poderes”, expresó Adriano Espaillat, presidente del Caucus Hispano, mediante un comunicado. Aseguró además que la administración anterior habría utilizado mecanismos gubernamentales para ejecutar políticas de deportación caracterizadas por el descontrol y el maltrato.
El legislador Joe Neguse, también firmante de la acción legal, criticó lo que consideró un “desdén flagrante por el marco legal y constitucional” por parte del gobierno, y subrayó la necesidad de una respuesta firme por parte de las instituciones.
La denuncia coincide con recientes visitas de congresistas demócratas a instalaciones como la de “Alligator Alcatraz”, abierta el 1 de julio en Florida, cuya capacidad supera los 3,000 migrantes. Los legisladores describieron graves condiciones de hacinamiento, deficiencias sanitarias y falta de control ambiental en medio de altas temperaturas, lo que ha encendido alertas entre organizaciones de derechos humanos.
En paralelo, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) evalúa asignar $608 millones a gobiernos estatales y locales para la construcción o ampliación de centros de detención, una medida que ha despertado debates sobre el modelo de atención migratoria en Estados Unidos.