Tegucigalpa, Honduras.- La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, anunció que, a partir de la madrugada del 4 de marzo, se instaurará el silencio electoral, una medida clave en el proceso electoral del país.
Esta regulación prohíbe a los precandidatos presidenciales realizar solicitudes directas de voto, marcando el inicio de un período de reflexión para los votantes.
La presidenta López enfatizó la relevancia de esta etapa en el marco de una «campaña responsable», donde se cierran las puertas a las invitaciones públicas y directas por parte de los políticos hacia sus simpatizantes. En cumplimiento con la legislación hondureña, estos precandidatos no podrán utilizar medios de comunicación o plataformas publicitarias para instar al voto. Sin embargo, están autorizados a difundir sus propuestas de gobierno durante este periodo.
El CNE ha advertido que cualquier violación a esta normativa conlleva sanciones que pueden llegar hasta 40 salarios mínimos y, en casos severos, la descalificación de los partidos responsables.
Se estima que cerca de 6 millones de hondureños están llamados a participar en las elecciones primarias del 9 de marzo, con 5,741 centros de votación dispuestos en todo el territorio nacional. Para asegurar un ambiente de orden y seguridad durante el evento electoral, se implementará la ley seca, que comenzará el 8 de marzo a las 06:00 a.m. (hora local) y concluirá el 10 de marzo a las 06:00 a.m.
Estas elecciones primarias son fundamentales, ya que permitirán a los partidos políticos seleccionar a sus representantes para las elecciones generales programadas para el próximo año. En dichas elecciones, se elegirán al próximo jefe o jefa de Estado, así como a los diputados del Congreso Nacional, consolidando un momento decisivo en el proceso democrático de Honduras.
