Aktau, Kazajistán.- Un trágico accidente aéreo ocurrió el miércoles cuando un avión de Azerbaiyán con 67 personas a bordo se estrelló cerca de Aktau, dejando al menos 32 sobrevivientes, según informes de funcionarios locales. Lamentablemente, más de 30 personas podrían haber perdido la vida en el incidente.
El avión, un Embraer 190, realizaba un vuelo desde Bakú, Azerbaiyán, hacia la ciudad rusa de Grozni en el Cáucaso Norte. En un comunicado en Telegram, el Ministerio de Emergencias de Kazajistán informó que entre los pasajeros se encontraban cinco miembros de la tripulación.
Hasta el momento, se han hospitalizado 29 sobrevivientes, incluidos dos niños, mientras que el estado de salud de otros, como Alexey Díaz Salas, un trabajador de 48 años, es crítico debido a las graves quemaduras sufridas durante el accidente.
Los detalles del accidente son alarmantes. El Ministerio de Emergencias de Kazajistán indicó que la aeronave realizó un aterrizaje de emergencia a solo 3 kilómetros de la ciudad. Inicialmente se reportaron 25 sobrevivientes, pero tras una intensa operación de búsqueda y rescate, el número se actualizó a 32, aunque se estima que el número de víctimas fatales podría ser superior a 30.
Entre los pasajeros se encontraban 42 ciudadanos azerbaiyanos, 16 rusos, seis kazajos y tres kirguises. Los primeros informes sugieren que el piloto desvió el vuelo hacia Aktau debido a un impacto de ave, lo que provocó una «situación de emergencia a bordo», según declaraciones de la autoridad de aviación civil de Rusia, Rosaviatsia.
Imágenes compartidas en redes sociales muestran a la aeronave realizando un descenso abrupto antes de estrellarse, generando una bola de fuego. Algunos videos documentan a los sobrevivientes ayudando a otros pasajeros a escapar de los restos del avión.
La aerolínea Azerbaijan Airlines ha expresado su solidaridad y compromiso de mantener al público informado, mientras que su presencia en redes sociales ha cambiado a un fondo negro en señal de luto. Una delegación oficial de Azerbaiyán, que incluye al ministro de situaciones de emergencia y al fiscal general adjunto, ha sido enviada a Aktau para investigar las circunstancias del accidente.
El presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, que se encontraba en Rusia para reuniones oficiales, regresó a su país tras enterarse del desastre. Aliyev expresó sus condolencias a las familias afectadas y declaró el 26 de diciembre como día de luto nacional. El presidente ruso, Vladímir Putin, también manifestó sus condolencias y envió un equipo médico y recursos al sitio del accidente.
Las investigaciones sobre el siniestro están en curso por parte de las autoridades de Kazajistán, Azerbaiyán y Rusia. Embraer, el fabricante de la aeronave, ha indicado su disposición para colaborar con las autoridades en la investigación del accidente.