Indiana.- Un preso fue ejecutado mediante inyección letal a la medianoche del miércoles, marcando la primera ejecución en 15 años en el estado de Indiana.
Joseph Corcoran, de 29 años, recibió la inyección de pentobarbital en una prisión estatal después de una prolongada batalla legal que se extendió por más de una década debido a su condena por cuatro homicidios cometidos en 1997.
Corcoran fue declarado muerto aproximadamente 40 minutos después de la medianoche del martes. Su condena se debió al asesinato de varios individuos, incluidos su hermano y el prometido de su hermana, así como otros dos hombres.
Los abogados de Corcoran habían solicitado a la Corte Suprema que detuviera la ejecución, argumentando que sufre de esquizofrenia paranoide y alucinaciones, lo que podría contradecir las enmiendas octava y decimocuarta de la Constitución de los Estados Unidos. Sin embargo, la Corte decidió no intervenir en el caso. A pesar de las preocupaciones sobre su salud mental, Corcoran manifestó su deseo de proceder con la ejecución.
El gobernador Eric Holcomb emitió un comunicado tras la realización de la ejecución, subrayando que el caso de Corcoran fue revisado exhaustivamente durante los últimos 25 años por diversas instancias judiciales. “Su sentencia nunca ha sido revocada y se llevó a cabo según lo ordenado por la corte”, afirmó Holcomb.
La ejecución de Corcoran representa el inicio de una nueva fase para el estado, que anunció este año la reanudación de las ejecuciones tras una moratoria que duró 15 años. El último condenado ejecutado antes de Corcoran fue Matthew Eric Wrinkles en 2009, quien enfrentó la pena capital por un triple asesinato.