Una mujer inglesa dio a luz a su primer hijo, Soren, y semanas más tarde su esposo se quitó la vida.
Como parte de la investigación judicial, la policía se quedó por un tiempo con las pertenencias del fallecido, entre estas el teléfono celular, y luego de ello, se las devolvió a la viuda. Fue en este escenario que Marianne Fraser revisó el dispositivo móvil para así buscar alguna explicación ante la decisión que había tomado su difunto marido, pero descubrió una terrible verdad.
Según publica el medio The Sun, la mujer descubrió, después de encontrar mensajes de texto y una tarjeta de regalo, que su esposo le había sido infiel. La viuda contó que encontró una llamada de varios minutos entre ambos mientras ella se encontraba en la sala de parto dando luz a su hijo.
“Fue un golpe tras otro, seguía pensando que me despertaría por algún analgésico posparto”, dijo en la conversación con el citado medio. “Hubiera preferido saberlo. Creo que el conocimiento me dio algún tipo de cierre”.
Después, Marianne expresó: “Me quedé en shock total. Es raro estar enojado con alguien que ya no está vivo”.
Finalizó mencionando que ha superado la infidelidad de su fallecido marido. «Es extraño estar enfadado con alguien que ya no está vivo. Tengo una opción: puedo quedarme en mi casa y pudrirme o puedo mostrarle a mi hijo la vida maravillosa que me espera», cerró.
