Shannon Leigh Elliott, de 27 años, ha sido sentenciada a cadena perpetua por el brutal asesinato de Turner Simpkins, un niño de 5 años. El crimen tuvo lugar en julio de 2023 en la localidad de Chapmansboro, en el condado de Cheatham, Tennessee.
La investigación, llevada a cabo por la Oficina de Investigaciones de Tennessee (TBI), reveló un cuadro desgarrador de abuso infantil. Elliott, quien mantenía una relación sentimental con el padre de Turner, sometió al pequeño a una tortura prolongada que incluyó golpes, bofetadas, estrangulamientos y mordeduras. La autopsia determinó que el niño murió desangrado internamente como consecuencia de las múltiples heridas sufridas.
Las autoridades encontraron evidencia contundente, incluyendo grabaciones que documentan los actos de violencia perpetrados por Elliott. Estas pruebas fueron cruciales para que un gran jurado la acusara formalmente de dos cargos de asesinato en primer grado y tres cargos de abuso infantil agravado.
Tras un juicio, Elliott fue declarada culpable de todos los cargos por los que fue juzgada. La jueza encargada del caso la sentenció a cadena perpetua por el delito de asesinato en primer grado y a 20 años de prisión por cada uno de los cargos de abuso infantil agravado.
Este trágico caso ha conmocionado a la comunidad y ha puesto de manifiesto la importancia de denunciar cualquier sospecha de maltrato infantil. Las autoridades locales han expresado su consternación por la violencia ejercida contra un niño tan pequeño e indefenso.
