El inicio del verano en Florida trajo consigo una serie de tragedias en sus costas, donde el fuerte oleaje ha cobrado la vida de al menos seis turistas.
De hecho, estas condiciones peligrosas en las playas han obligado al cierre de varias zonas, mientras las autoridades advierten que la situación podría persistir en los próximos días.
Las playas de Panama City Beach, en el Panhandle en el Golfo de México, y la isla Hutchinson en la Costa del Tesoro en el sureste de Florida, fueron testigos de las fatalidades de los bañistas. Las alertas por corrientes de retorno, comúnmente conocidas como resacas, se han extendido a lo largo de la costa, resultando en el cierre de varias playas durante este fin de semana.
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En un trágico incidente, tres jóvenes turistas de Alabama perdieron la vida al ser arrastrados por una corriente de retorno en Panama City Beach el viernes por la noche. A pesar de los esfuerzos de rescate, lamentablemente fallecieron en el hospital. Otro nadador también requirió reanimación cardiopulmonar tras ser rescatado de las aguas este domingo.
En la isla Hutchinson, una pareja de Pensilvania sufrió la misma suerte al ser arrastrada por la resaca hacia el Atlántico. A pesar de los intentos de salvamento, la pareja fue encontrada inconsciente y lamentablemente fallecieron en el hospital, mientras que sus hijos lograron ponerse a salvo en la orilla.
Con más de 30 muertes de nadadores relacionadas con corrientes de resaca en el Estado del Sol en lo que va del 2023, las autoridades instan a la precaución en las playas de Florida. Se espera que las condiciones peligrosas persistan hasta el lunes, por lo que es imprescindible seguir las indicaciones de seguridad.
