Un hombre con doble nacionalidad mexicana y británica, que según sus familiares fue detenido en Catar por ser homosexual, fue sentenciado por la justicia catarí a seis meses de prisión aunque podrá abandonar el país tras pagar una multa, informó el gobierno mexicano.
Manuel Guerrero Aviña, empleado de una aerolínea en ese país árabe, fue arrestado en febrero luego de que las autoridades cataríes le «tendieron una trampa», según su familia.
La detención ocurrió durante una reunión organizada por policías locales a partir de un perfil falso en la aplicación de citas Grindr, popular en la comunidad LGTB, reportaron sus parientes.
Guerrero, quien se encontraba en libertad provisional, fue condenado a seis meses de cárcel, que no deberá cumplir, y «podrá salir del país una vez que el monto total de la multa» de 10.000 riyales cataríes (unos 2.746 dólares) sea cubierto, señaló la cancillería en un comunicado el martes.
«La representante legal del señor Guerrero Aviña identificará opciones legales para que su salida (…) ocurra a la brevedad», añadió la institución.
Durante la audiencia judicial del martes, Guerrero –que ha vivido en Catar siete años–, estuvo acompañado por su madre y por personal diplomático y consular de México y de Reino Unido, explicó la cancillería.
La familia de Guerrero denunció en febrero que durante su arresto la policía catarí escondió drogas en su apartamento y sostuvo que este es un «modus operandi» para encarcelar a personas homosexuales.
Acusaron que también fue sometido a «tortura psicológica» y privado de su tratamiento farmacológico para el VIH.
Un funcionario catarí indicó que Guerrero fue «arrestado por posesión de sustancias ilegales encima y en su apartamento», según un comunicado. «Un test de detección de drogas más tarde dio positivo, confirmando la presencia de anfetamina y metanfetamina», agregó.
Guerrero y su familia hicieron «numerosas alegaciones falsas para intentar generar simpatía en el público», aseguró el funcionario, que requirió el anonimato.
«Las creencias de una persona, sus orígenes o su orientación [sexual] no la eximen de la ley», insistió. En la detención de Guerrero «no se tuvieron en cuenta otros factores», y fue tratado «con respeto y dignidad durante todo el arresto».
Catar es blanco de críticas de organizaciones de derechos humanos por sus leyes que reprimen la homosexualidad.
Amnistía Internacional pidió que la sentencia de Guerrero fuera anulada.
Para Aya Majzoub, de la antena de Oriente Medio y Norte de África de la oenegé, existen «serios temores» de que Guerrero fue señalado «por su orientación sexual y obligado a suministrar información a las autoridades que podían usarla para continuar una mayor represión contra los individuos LGTBI».
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