Un grupo de socorristas del Departamento de Policía de Portland está siendo elogiado por su heroica acción al salvar la vida de un niño pequeño que se estaba ahogando. El incidente ocurrió el 26 de abril, alrededor de las 11 am, cuando una mujer desesperada irrumpió en el estacionamiento del departamento con su hijo inconsciente en brazos.
Las imágenes de las cámaras de vigilancia capturaron el momento dramático en que la madre, presa del pánico, pide ayuda a gritos. Rápidamente, un grupo de oficiales acudieron a su auxilio y se encontraron con un niño de aproximadamente dos años que no respiraba.
Sin dudarlo, el oficial Dylan Ladd, un agente con dos años de experiencia, comenzó a realizar la maniobra de Heimlich para intentar desalojar el objeto que obstruía la garganta del niño. Mientras tanto, la madre observaba con angustia y suplicaba por la vida de su hijo.
Tras varios minutos de tensión, la oficial de control de animales Jamie Weekley se unió a los esfuerzos de reanimación. Weekley, quien también es madre y tiene experiencia en primeros auxilios, describió que el niño no respondía a ningún estímulo y que su estado era crítico.
Finalmente, después de lo que parecieron una eternidad, el niño tosió y comenzó a llorar. La madre, aliviada y agradecida, abrazó a su pequeño mientras los oficiales celebraban el éxito de la reanimación.
El jefe de policía de Portland, Jason Williams, elogió el trabajo de sus oficiales y destacó la importancia de la capacitación constante. «Estoy súper orgulloso del trabajo que hicieron», dijo Williams. «La lección aquí es que nunca puedes bajar la guardia. A veces te llaman al caos. Y a veces el caos te llega. Así que incluso aquí, en un edificio seguro, nunca se sabe lo que viene por la puerta principal, así que aplaudo su disposición y su capacidad para adaptarse a un entorno cambiante».
