El FC Barcelona sufrió más de lo esperado para ganar por la mínima (1-0) a un equipo de Las Palmas que jugó más de una hora con diez pero cumplió el objetivo de presionar al Real Madrid, este sábado en la 30ª jornada de la Liga española.
Con 67 puntos, el Barça se coloca provisionalmente a cinco de su eterno rival madrileño (72 puntos), que el domingo recibirá en el Santiago Bernabéu al Athletic, cuarto clasificado.
El brasileño Raphinha fue el autor del único tanto de la noche en el estadio Olímpico de Montjuic. Fue en el 59, cuando el portugués Joao Félix -que acababa de saltar al césped- colgó un balón al área, donde apareció el brasileño para rematar de cabeza directo a la escuadra de los canarios, lejos del alcance del arquero Aarón Escandell, que entró en juego en el minuto 25 por la expulsión del guardameta Álvaro Vallés.
«Son tres puntos importantes para la Liga y vamos a seguir luchando hasta el final. No nos daremos por vencidos», prometió Raphinha en declaraciones a Movistar.
La cuenta a favor de los azulgranas pudo haber sido más amplia.
En la primera parte se le anularon dos tantos, uno a Robert Lewandowski (4) y otro a Raphinha (19). El Barça envió además dos balones al larguero, por medio de Lewandowski (33) y de Joao Félix (77).
En los instantes finales dio un susto el equipo visitante, con un zurdazo de Alberto Moreiro que se fue fuera por poco en el 86 y que hubiera supuesto el empate.
«Hicimos un gran partido. El resultado se ha quedado corto porque tuvimos ocasiones muy claras para sentenciar. La verdad es que se nos puso muy bien con la expulsión de Vallés», declaró el técnico del Barça, Xavi Hernández.
Este triunfo es el tercero seguido que logra el Barça en Liga, donde en sus últimos cinco partidos en el campeonato no ha recibido además ningún gol.
Esa buena racha le permite llegar a la recta final con ánimos renovados, soñando con poder dar caza al Real Madrid sin olvidarse del reto de los cuartos de final de la Liga de Campeones, donde se enfrentará en abril al París Saint-Germain de Kylian Mbappé.
Por su parte, la derrota no tiene grandes consecuencias para Las Palmas (12º), asentado en la zona tranquila de la clasificación, todavía 12 puntos por encima de los puestos de descenso, por lo que no parece peligrar su permanencia.
– Episodios racistas –
En el resto de partidos, el Sevilla se alejó del descenso con una victoria 1-0 en el campo del Getafe, gracias a un tanto de Sergio Ramos en el minuto 5. Gracias a ello, el equipo hispalense, ahora decimocuarto, se distanció seis puntos sobre la zona roja de la tabla.
Pero más allá del resultado, el partido quedó marcado por un nuevo episodio de insultos racistas, llegando incluso a activarse el protocolo para estos casos, con una breve interrupción del duelo y un mensaje por megafonía.
En el acta del partido, el árbitro señaló que escuchó cómo se insultaba al defensa argentino del Sevilla Marcos Acuña («Acuña mono» y «Acuña vienes del mono» fueron los cánticos reflejados por el colegiado).
El entrenador del Sevilla, Quique Sánchez Flores, dijo tras el partido que él también había sido insultado.
El arquero Álvaro Vallés ve la tarjeta roja tras derribar a Raphinha en la derrota de su equipo, Las Palmas, en el campo del Barcelona, el 30 de marzo de 2024
«No quiero que usen gitano como un insulto racista. Hay una parte del público que piensa que puede venir aquí a decir lo que quiera. Somos trabajadores, venimos a trabajar y se nos tiene que respetar», afirmó el técnico, que en el pasado dirigió al Getafe.
A ello se sumó que un partido de la 1ª RFEF (tercera categoría del fútbol español) fue suspendido antes de terminar también por un episodio racista. El arquero senegalés del Rayo Majadahonda, Cheikh Sarr, llegó a saltar a la grada del estadio del Sestao para enfrentarse a un hincha, motivo por el que fue expulsado, tras lo cual sus compañeros se negaron a continuar.
Por su parte, el Mallorca (15º), que el próximo sábado disputará la final de la Copa del Rey ante el Athletic, empató 0-0 en el campo del Valencia (8º), mientras que Osasuna (9º) se impuso 3-0 en casa de un Almería (20º, colista) cada vez más hundido hacia la segunda división.
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