Kissimmee, Florida.- Una mujer de 36 años, identificada como Tiffany Lee Griffith, enfrenta cargos criminales tras ser acusada de sumergir violentamente a un menor en la piscina de un resort el pasado 19 de diciembre. Griffith, quien anteriormente se desempeñó como oficial de policía, fue detenida el mismo día del incidente.
Los hechos ocurrieron en un complejo turístico de Kissimmee mientras un grupo de niños jugaba en el área de la piscina. Según el reporte oficial, el conflicto se originó cuando uno de los menores, de 6 años, supuestamente hundió al hijo de la acusada durante el juego.
La reacción de Griffith fue inmediata: ingresó al agua, increpó al pequeño y, sujetándolo por los hombros, lo sumergió a la fuerza durante varios segundos. Testigos indicaron que el niño salió a la superficie en estado de shock y con una hemorragia nasal. Lejos de mostrar arrepentimiento, la mujer confrontó y reprendió a la madre de la víctima antes de retirarse del lugar.
Durante el proceso de detención, Griffith reveló a los investigadores su pasado en las fuerzas del orden. La mujer trabajó para el Departamento de Policía de Punta Gorda entre 2013 y 2018. Irónicamente, su función principal fue la de oficial de recursos escolares en una preparatoria, donde se encargaba de impartir talleres a estudiantes sobre los peligros del acoso escolar (bullying) y la seguridad digital.
Tras la denuncia interpuesta por los padres del menor agredido, Griffith fue trasladada a la cárcel del condado de Osceola. Registros judiciales indican que la exoficial recuperó su libertad tras el pago de una fianza de 20,000 dólares. Las autoridades continúan con el proceso legal por los daños físicos y psicológicos causados al menor.
